lunes, 15 de febrero de 2010

"Todo lo contrario. Algunos han perdido las ilusiones, se han vuelto sensatos y conformistas. Corren el riesgo de convertirse en funcionarios del sentido común. Para pensar bien, quiero decir para ser lo contrario de un bien pensante, hay que creer que el mundo se puede cambiar. Hay que estar en un lugar excéntrico, opuesto al orden establecido, fuera de todo. No tengo confianza en nada ni soy un hombre optimista, pero justamente por eso creo que hay que aspirar a la utopía y a la revolución. Sólo por amor a los desesperados conservamos todavía la esperanza, solía decir un amigo de Brecht."

Ricardo Piglia, en Crítica y ficción.

viernes, 5 de febrero de 2010

"¿Qué innovaciones introdujo James y a qué se debió el fracaso inmediato de sus novelas? Si sus aportaciones fueron tan importantes, ¿por qué sus libros no irrumpieron en la escena literaria con el estrépito con que los partidarios o detractores de Ulises, El sonido y la furia o Al faro saludaron tales obras? Tal vez porque su transformación del género no tenía nada que oliera a rebelión. Sus descubrimientos, que posteriormente hicieron posible el nacimiento de Ulises, El sonido y la furia y Al faro, fueron realizados sigilosa, callada, neutramente. Pero también puede deberse al carácter de renuncia a los impulsos vitales, de ineludible derrota del héroe (el protagonista de James vive, por el contrario del héroe romántico, como un cautivo de la sociedad, sin desafiar ni infringir sus reglas. Sujeto antiheroico, se conforma con exaltar el exilio interior como única posibilidad de enfrentarse a la corrupción y a la mezquindad que lo circundan; la derrota se convierte, paradójicamente, en su único triunfo posible) (...). El éxito de James sólo se logra en el momento en que los programas de liberación social y sexual han sido elaborados por otros autores y por lo mismo ya nadie se los exige a su obra, y cuando abatidas muchas ilusiones de la imaginación liberal por la atroz realidad de falsos paraísos, el rescate de la dignidad personal y la resistencia moral parecen ligarse casi obligatoriamente al concepto de exilio interior."

Del Mago de Viena, Sergio Pitol. (Las negritas son mías.)